Guerras, abusos, equivocaciones, heridas en la propia historia personal y familiar, son cargas que nos impiden vivir en la paz.
Más esperanza, más libertad, más felicidad. Todos queremos una vida, vivida en la paz y buscamos con afán alguien que nos ofrezca un camino.
Jesucristo en el Evangelio se presentó como el Camino, la Verdad y la Vida.
¡La Pacificación interior es un anuncio de esperanza que se cumple hoy!
En las diferentes Países dónde estamos presentes, ofrecemos caminos de pacificación interior, para sanar las heridas de la vida y mirar al futuro sin angustia.
Ente más esté mi corazón en paz, más paz habrá en el mundo.